Título : Street Hoop
Año : 1994
Desarrolladora : Data East
Plataforma : Arcade, Neo Geo
Género : Deportes
He de reconocer que no soy un gran amante de los deportes, en ninguna de su variantes. Desde bien pequeño no me ha interesado ni practicarlos, mas allá de pasarlo bien con los amigos, ni verlos por televisión, cosa que me aburre soberanamente.
Sin duda, es algo que los lectores habituales, habrán notado. De pocos títulos perteneciente al género del deporte se hablan por aquí. No porque haya buenos títulos de deporte, que los hay, si no simplemente porque al interesarme poco los deportes en general, no suelo acercarme mucho a esos juegos. Como mucho alguna partida rápida con amigos y poco más.
Para que un juego de deporte me atraiga, debe tener algo más. Algo que me llame la atención y lo haga especial. Ya sea su control, que sea divertido o simplemente, se pase todo por el aro y nos ofrezca puro espectáculo.
Y es que eso es algo que encuentro a faltar hoy en día. Durante los ochenta buena parte de los noventa, teníamos dos tipos de juegos de deporte, los simuladores y los arcade. Mientras los primeros buscaban un estilo de juego más realista posible, los segundos cogían el deporte y lo llevaban al extremo, ofreciendo diversión del minuto uno, aun fuera a costa de mostrar cosas imposibles, como mates de fuego. Midway por ejemplo era experta en esto, con juegos como Arch Rivals, NBA Jam o WWF Wrestlemania. Videojuegos que ofrecían horas y horas de diversión. Juegos que ya no se en encuentran, pues el mercado se ha decantado por los simuladores.
Street Hoop pertenecía a este segundo genero. Era un juego de baloncesto, pero que nada tenía que ver con el deporte real. Para empezar, no era profesional, si no básquet callejero, en partidos de tres contra tres. Como podéis imaginar, aquí todo valía, sin llegar a las tortas, no existiendo ni faltas por ataque ni por defensa. Lo primordial era ofrecer espectáculo y lo hacía de manera muy curiosa.
Durante el partido, mientras hacíamos mates, triples y tiros en suspensión, todo de una manera muy sencilla y cómoda, se nos iba rellenando una barra que teníamos en la parte posterior de la pantalla. Al cargarse la barra por completo, que solo se rellenaba si hacíamos canasta, era cuando podíamos usar el súper tiro. Según el jugador hacia una cosa u otra, ya fuera lanzar una bola de fuego, un mate de salto estratosférico o incluso un súper mate, todos ellos imparables. Ese súper tiro es que el daba y sigue dando hoy en día, espectacularidad al título.
De hecho, si uno disecciona Street Hoop y lo analiza detenidamente, se da cuenta que no le hacía falta ese ingrediente extra para triunfar. El control es excelente y sencillo de aprender, dos botones para robar la pelota, pasársela al compañero, hacer tiros, mates e incluso amagos, gracias a que según estuviéramos atacando o defendiendo, hacían una cosa u otra. Los gráficos son de escándalo, sobre todo si nos detenemos a pensar que son de 1994, demostrando de lo que era capaz una bestia como era Neo Geo. Sprites gigantescos, animados de manera soberbia y con unos fondos llenos de detalles. La música, mejor aún, totalmente en concordancia con el juego, siendo en su mayoría raps o músicas muy animadas. Solo por esto, este juego hubiese destacado en su época, pero sin el añadido del súper tiro, hubiese sido olvidado rápidamente.
No extraño, que cuando uno pregunta por este juego , la mayoría responda de gente responda cosas como «Si, ese de los mates imposibles» o «El de los triples de fuego». Es que esos súper tiros son pirotecnia pura, teniendo los mejores efectos visuales y sonoros del todo el juego. Cuando uno se acercaba a los recreativos y en la demo, veía aquello, solo podía echar una moneda y hacer unos cuantos mates. Además de que no era solo espectáculo, le añadía algo de estrategia al título. Hemos de pensar que cada cuatro canastas, el equipo ganaba un tiro que era imposible de parar, haciendo que intentáramos a toda costa que el rival hiciera esas cuatro canastas antes que nosotros.
Y es que como se disfruta realmente a este juego, es a dobles. El gran fallo del juego, algo por otra parte normal al ser un arcade pensado para que nos gastáramos cuantas más monedas mejor, era su alta dificultad. Se ha de reconocer, que en los niveles más altos de dificultad, llega incluso a hacer trampas, consiguiendo cosas imposible como hacer un triple desde la otra punta del campo, en el ultimo minutos, si va perdiendo. Aunque esto se ha de reconocer que en parte, también tenía la culpa nuestra característica picaresca española, cuando el dueño del recreativo, no dudaba poner la maquina en el nivel más alto para que las partidas durasen lo menos posible.
Dejando de lado este detalle, que podemos evitar poniéndolo en niveles inferiores de dificultad, con un amigo al lado, el juego cambia completamente. Al estar los dos en igualdad de condiciones, solo afectara la habilidad de cada jugador y el equipo escogido, pues cada uno tenía sus propias estadísticas, haciendo el titulo más justo y divertido, que ofrece horas y horas de diversión. Incluso a día de hoy, apetece una partida rápida con un amigo, que sin dudas se convertirá en toda una tarde dándole al juego.
Como curiosidad hay que destacar que el juego, en realidad se llamo Dunk Dream, dejando constancia de que los mates eran una parte fundamental del título. Al llegar a occidente, por una de aquellas decisiones inexplicables, se cambio el nombre a Street Slam para Estados Unidos y Street Hoop para Europa, no siendo el único cambio. Los equipos pasaron de ser internacionales, estando España entre ellos, a simplemente ciudades de América, como por ejemplo Nueva York o Filadelfia. Seguramente Data East pensó que ambientarlo en Estados Unidos vendería mas que hacer equipos por países.
Gracias al éxito que este título tuvo, no fue un súper ventas ni la maquina más deseada de los arcade pero sin duda tuvo sus cinco minutos de fama, apenas un año después se saco al mercado una secuela que se llamo Dunk Dream 95 en Japón y Hoops 96 en Europa.
Como buena secuela, ofrecía mas de lo mismo, pero con pequeñas mejoras, que dotaban al título de una mayor rapidez, espectacularidad y una mejora muy importante, el sistema de súper tiros cambio. Ahora no eran automáticos, en Street Hoop se activan a la que hacemos un triple o un mate, si no que teníamos que tener el botón pulsado para poder utilizarlo. De esta manera podíamos reservarlo para el momento indicado, pero con cuidado, pues también se añadió la súper defensa. En la secuela, podíamos parar los súper tiros si teníamos llena la barra y la activamos a la vez que el rival.
Curiosamente, pese a estas mejoras, que hacian que fuera un mejor juego, el que siempre se recuerda con cariño, es el original. Y es que Street Hoop es de uno de esos juegos, que sin llegar a estar en el Olimpo del genero, una vez los conoces, te marcan.
3 comentarios
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También a mi me marcó el juego, aunque nunca he sido muy aficionado a los juegos deportivos.
Aún así, cuesta resistirse a su exquisita mecánica y frenético desarrollo de los partidos.
Buen artículo compañero. 😉
Autor
Muchas gracias. La particularidad de este tipo de juegos es gustar a gente a las que no les atrae el deporte en cuestión.
Esta es una de mis consolas favoritas y este era un juego muy chulo que me tenía loco.
Vi esta retro y quizás me haga con ella para rememorar las partidas que jugaba en casa de mi primo.
La calidad gráfica no tiene nada que ver con lo que hay ahora, pero la emoción es máxima.
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