Moonstone: A Hard Days Knight

Titulo : Moonstone: A Hard Days Knight
Año : 1991
Desarrolladora : Mindscape
Plataforma : Amiga
Genero :  Rol, Acción

El Amiga puede presumir de tener los juegos más originales en su época. Mientras en otras plataformas teníamos los clásicos plataformas, juegos de carreras, acción o shoot ‘em up, en este ordenador teníamos juegos que mezclaban varios géneros.

Y de la manera más curiosa, tanto podíamos encontrar juegos de aventuras con toques de acción, estrategia con minijuegos, o juegos como el de hoy, que combinaba acción y rol.

Advertencia, el resto del articulo contiene imágenes violentas

Seria digno de estudio el saber porque salían esta clase de juegos en Amiga. Quizás fuera porque el público era diferente, por contar con periféricos como un teclado o simplemente por su superioridad a nivel técnico.

Fuera por la cuestión que fuera, la verdad era que esos juegos daban una variedad y una calidad al catalogo de Amiga que los otros no tenían.

El juego de hoy recuerda mucho a un juego de tablero, de hecho casi se podría trasladar su mecánica sin cambiar mucho sus reglas.

Moonstone: A Hard Days Knight, nos propone un sencillo argumento. En un mundo fantástico medieval, hemos sido escogidos para devolver la misteriosa piedra lunar a su punto de origen, Stonehenge.

Si conseguimos nuestro objetivo, conseguiremos poder, fama y honor. Pero no será una tarea fácil, otros tres caballeros también han sido escogidos para tal efecto, así que debemos luchar contra numerosas bestias y contra los demás caballeros con tal conseguir nuestro objetivo.

Como podemos ver, el argumento es simple y directo. No se nos explica porque debemos recuperar la piedra, que es esta ni porque hay otros tres caballeros mas. Solo se nos explica el objetivo y punto, como si fuera un juego de mesa.

Nada más comenzar el juego, deberemos escoger que caballero queremos ser. Esta decisión será meramente estética, pues solo cambiara el color y la zona donde comenzamos.

Hemos sido elegidos para una difícil tarea

Después de escoger personaje, nos encontraremos con un sencillo mapa dividió en cinco zonas. Misty Moors, Wetlands, Great Forest, Northern Wastelands y el propio Stonehenge serán estas zonas.

Realmente de las cinco, solo cuatro son las más importantes. Stonehenge, solo es vital en la parte final de juego y para recuperar vida sacrificando un objeto mágico.

Las cuatro zonas restantes estarán repletas de dólmenes. Estos lugares estarán custodiados por enemigos y aquí es donde entra la parte de acción.

Cada vez que nos adentremos en un dolmen, deberemos luchar contra un enemigo aleatorio. Según la zona será de un tipo u otro. Realmente solo habrá dos tipos de enemigos por zona, unos más débiles pero más numerosos y otros más poderosos pero en menor número.

Una vez derrotados los enemigos, obtendremos puntos de experiencia y objetos. De nuevo estos objetos, serán aleatorios y pasaran desde vulgares dagas a poderosas armaduras.

Y aquí es donde entra la parte de rol, nuestro personaje irá aumentando poder y consiguiendo mejores objetos. Empezaremos como un simple caballero y acabaremos como un gran guerrero.

Como buen juego de rol, los puntos de experiencia podrán ser repartidos entre las habilidades de fuerza, constitución y resistencia. Cada característica tendrá un efecto diferente en nuestro personaje, por ejemplo cuanto más fuerza más daño haremos y cuanta más constitución más puntos de vida tendremos.

Una vez explicado los distintos estilos de juego, pasare a explicar como es el juego.

Básicamente se divide en dos turnos. El primero consistirá en explorar el mapa, deberemos escoger donde ir, si a un dolmen cercano o lugar especial. Porque cada zona tendrá una zona especial, ya sea una ciudad donde comprar objetos o una torre de un mago que nos podrá ayudar o no.

Nos esperan duras batallas

El movimiento será limitado, pues no podremos pasar de un punto a otro del mapa directamente. Conforme vayamos aumentando de poder, nos podremos mover más o menos.

Una vez vayamos a dolmen, pasaremos al turno de combate. En este turno deberemos derrotar al enemigo o enemigos que haya en la pantalla. Este modo es muy parecido al Barbarian.

Deberemos atacar y defenderse en el momento adecuado, pues el estilo de lucha es muy técnico. No se tratara de dar espadazos como un loco, pues como hagamos eso pronto moriremos. Hay que pensar que llevamos una espada a dos manos y esta difícil de manejar.

Hay que destacar que las batallas son bastante gores, no será raro ver decapitaciones, amputaciones o enemigos cortados por la mitad. En su época, este juego destaco bastante en este aspecto, aunque si la sangre no es de nuestro agrado podemos desactivarlo.

Una vez derrotados a los enemigos, conseguiremos algunos objetos. Y aquí es cuando entra una de las gracias del juego,  para conseguir la Moonstone, primero hemos de conseguir cuatro llaves. Una por cada zona y la única manera de conseguirlas es derrotando monstruos.

Así que tendremos que recorrer el mapa en busca de las cuatro llaves. Una vez tengamos las cuatros, lucharemos contra el guardián de la Moonstone, el cual deberemos derrotar para conseguirla. Una vez conseguida, la tendremos que llevar a Stonehenge.

Aunque el juego ya es adictivo solo con el hecho de investigar el mapa y luchar, pues los combates, los objetos y enemigos son aleatorios en cada partida, a la larga se podría hacer aburrido.

Y aquí es donde entran en juego los otros caballeros. Al igual que nosotros, estos irán haciéndose más poderosos y consiguiendo objetos. Incluso a veces podrán conseguir algunas de las llaves.

Deberemos recorrer todo el mapa en busca de la moonstone

Esto hará que nos tengamos que dar prisa en conseguir las llaves, pues si tardamos mucho, alguno de los otros caballeros podrá hacerse con la Moonstone. Para evitarlo solo podremos conseguirlas antes que ellos o robárselas.

Y es que si un caballero esta cerca nuestra, podremos retarlo en un combate. Serán igual que el resto de combates, con la excepción de que no podremos matar a nuestro enemigo.  Pero al vencerlo, podemos robar uno de sus objetos, pudiendo escoger una llave si la tiene o alguna pieza de armadura.

Otro factor que nos hará no dormirnos en los laureles, será la aparición del dragón. A los pocos turnos, aparecerá un poderoso dragón, que nos podrá atacar aleatoriamente. Si nos coge en los primeros turnos, supondrá muerte segura, en niveles más altos un duro combate.

La gracia esta es que si conseguimos un pergamino del dragón, podemos invocarlo para que ataque a otro caballero, pudiéndole hacer mucho daño.

Pues como podéis imaginar, la gracia de este juego es jugarlo a cuatro jugadores. Aunque la maquina controla de manera magistral a los otros tres jugadores, nada se iguala en una partida a cuatro.

Los piques que hay en este juego son muy divertidos. No hay nada como ver la cara de los demás cuando consigues una llave, el terror que ocasiona que uno de tus enemigos tenga un pergamino del dragón o que el resto de jugadores se alíen contra un tercero porque este tiene tres llaves.

Un ejemplo de los brutales combates

Si los jugadores tienen el mismo nivel y un poco de malicia, este juego proporciona tarde de diversión. Además, si contamos con que este juego siempre es aleatorio, tenemos diversión infinita.

Si te gusto juegos como Defender of the Crown, este juego te encantara. Pues es el típico juego de planteamiento sencillo pero que engancha a la primera.

Una vez se ha entendido el sencillo planteamiento, que se aprende en un par de partidas, este juego nos ofrece diversión desde un inicio.

Con un control impecable, unos gráficos  muy buenos y un planteamiento sencillo, nos encontramos con uno de los juegos más divertidos del Amiga. Únicamente peca de una dificultad algo elevada en los combates, el resto tiene un nivel bastante alto.

Seguramente no estamos ante uno de los mejores juegos que ofrecía este ordenador, pero su original planteamiento, su jugabilidad y el hecho de que se pudiera jugar a cuatro hizo que se ganara un puesto entre muchos aficionados.

Un juego muy recomendable si buscamos un juego sencillo y divertido o pasar una buena tarde con tres amigos mas, os aseguro que haréis más de una partida o dos.