Historia del Videojuego : La crisis del videojuego de 1983

Como pudimos ver en la última entrega de esta sección, los videojuegos era un negocio al alza. En pocos años pasaron de ser una mera curiosidad a un mercado potente, en 1982 la industria facturaba 5313 millones de dolares anuales.

Y casi todo ese dinero se hacía solo en Estados Unidos, que es donde más se jugaban a videojuegos. Además que la gran crisis ocurrió solamente en  Estados Unidos. En Europa y Japón el mercado vivía mas de la producción propia que la del extranjero.

Por eso en América esta crisis también se le conoce como North American video game crash of 1983. Quizás un nombre mas apropiado para esta crisis, aunque nadie puede negar que fue un buen varapalo para una industria que acababa de nacer.

Por desgracia esta situación poco duraría, apenas un año después, en 1983 ocurría una gran crisis que casi destruye al videojuego domestico. Y eso que apenas tenía una década de vida.

Gente como Ray Kassar dirigen la industria, personas que apenas saben nada de videojuegos y que tratan fatal a sus empleados. Según ellos lo importante es producir, producir y producir. Da igual el resultado, cuantos más videojuegos mejor, total la gente comparara a ciegas. Y no solo Atari abusa de estas políticas, también otras empresas como Mattel.

Ray Kassar, uno de los artífices de la crisis

Además, que es peor aún, los propios fabricantes de hardware no tienen ni voz ni voto con lo que se produce para sus consolas. Al contrario que las consolas actuales, donde los fabricantes deben de dar el visto bueno, aquí cualquier editorial puede sacar su juego sin licencia.

Y mientras que empresas como Activision, procuran hacer juegos decentes, otras no dudan en sacar lo primero que se les ocurra por la cabeza. Ya sea por aprovechar tal licencia o cualquier moda pasajera.

Estas políticas hacen que pronto el mercado está saturado de juegos, algunos de ellos autenticas basuras injugables. Lógicamente, el publico empieza a desconfiar de los videojuegos. En esa época nadie puede asegurarte que el juego que compras no sea una estafa o un autentica basura.

Hoy en día tenemos cientos de medios para ver cómo es tal o cual juego, pero en esa época uno solo podía fiarse de su amigos y poco más. Muchos de esos juegos se venden más por la portada que por el juego en sí.

Poco a poco, la imagen del videojuego va mermando. Los usuarios cada vez quieren saber menos de esos juegos. Dada la cantidad de juegos y la ínfima calidad de estos, comprar uno a ciegas es casi como una ruleta rusa.

Por si fuera poco, Atari acabaría de rematar la jugada. En un solo año tiene dos grandes fiascos, E.T. y Pacman. Ambos juegos son una autentica basura, resultado de querer abarcar demasiado, mala planificación, tiempos de desarrollo imposibles y abusar de los empleados.

Hemos de pensar que por ejemplo, E.T. fue diseñado y programado por una sola personas en seis semanas. Ray Kassar quería que el juego estuviera apara navidades si o si y como las negociaciones por la licencia se retrasaron, no le dejaron más tiempo al programador.

En un ejemplo de lo enloquecida que estaba la industria, se hicieron los anuncios y toda la propaganda nada más tener los derechos. Todavía no estaba desarrollado el juego y ya se le puso fecha de salida.

Otro ejemplo fue con Pacman, se fabricaron 12 millones de copias cuando solo existían 10 millones de Atari 2600. Su ideología era que la gente se compraría el juego dos veces o la consola por el juego.

Como era de esperar, poco a poco el boca a boca hizo que nadie quisiera esos dos juegos. Incluso se devolvieron algunas de las copias vendidas, los usuarios declaraban que habían sido estafados.

Después de aquello, nadie confiaba en Atari. La gigante de los videojuegos se desploma en un solo año, si en 1982 era la reina en 1983 casi está en la completa ruina. A finales de 1983 llega a tener  unas pérdidas de 536 millones de dólares.

La caída es tan brutal, que incluso se dice que el lanzamiento de E.T supone el inicio de la gran crisis. Aun así y por si no fuera poco, los videojuegos recibirían otra estocada. Aparecen los primeros ordenadores personales, que van comiendo el terreno a las consolas.

Estos microordenadores sirven para algo más que para jugar, según su publicidad sirven para estudiar, hacer cálculos, llevar la contabilidad de la casa y mucho mas. La gente, que cada vez tiene menos interés en las consolas, se decanta por estos ordenadores.

Algo lógico, pues el mercado estaba sobresaturado de consolas y videojuegos de mala calidad. Los ordenadores en cambio dan más confianza al usuario, pues dan la impresión de ser de mejor calidad y mas útiles.

Aquí se dan casos totalmente irónicos y surrealistas, por ejemplo la propia Atari se hace la competencia a sí misma con sus ordenadores. Gracias a que es otra división, puede librarse del yugo de Ray Kassar y ofrecer productos de calidad.

El mercado estaba sobresaturado de juegos

Además, Commodore haría una jugada maestra. Gracias a que había comprado MOS Technologies, ellos mismos se fabricaban sus propios circuitos abaratando mucho el Commodore 64. Por poco dinero, cualquiera podía tener su propio ordenador. Lo que obligo al resto de fabricantes a bajar costes y precio si querían competir.

Todos estos factores hicieron que finalmente en 1983 hubieran  la gran crisis del videojuego, en apenas un año la venta de juegos se desplomaron y cientos de empresas dejaron el negocio o directamente cerraron.

Juegos que antes valían 35 dólares ahora valían 5, estanterías repletas de ellos, comerciantes regalándolos con las consolas para deshacerse de ellos. Nadie quería videojuegos. La gente volvió a mirar al videojuego como una moda pasajera, de nuevo nadie confiaba que eso tuviera futuro. Eran mirados como simples juguetes. Los únicos que sobrevivían eran los juegos para ordenador.

Magnavox dejo definitivamente el mundo del videojuego,  gran parte de Atari acabo vendida a Jack Tramiel fundador de Commodore, Coleco cada vez vendía menos videojuegos hasta que finalmente en 1985 lo dejo para siempre.

De los 5313 millones anuales que se facturaron en 1982 se pasan apenas a 100 millones de dólares en 1985. Casi nadie se dedica a fabricar videojuegos, solo salen algunos títulos de baja producción. Ninguna empresa grande se atreve a desarrollar un videojuego de alto presupuesto.

Los videojuegos volvieron a ser recluidos a salones recreativos

Los videojuegos vuelven a estar recluidos a los salones recreativos y el mercado domestico parece haber muerto para siempre. Solamente sobrevive el  mercado para ordenador, lo que hace que en Europa se impongan estos en lugar de las consolas.

Por suerte en 1985 aparecería una empresa nipona que haría resurgir el mercado del videojuego domestico. Esta empresa seria Nintendo y gracias a la agresivas estrategias de Hiroshi Yamauchi, el mercado volvería vivir una segunda época dorada.

Este paradigma haría que el testigo del liderazgo pasara de manos a Americanas a Japonesas, pero eso lo veremos en el próximo capítulo.