Simon the Sorcerer II: The Lion, the Wizard and the Wardrobe

Título: Simon the Sorcerer II: The Lion, the Wizard and the Wardrobe
Año: 1995
Desarrolladora: Adventure Soft
Plataforma: PC, Amiga, Mac
Género: Aventura gráfica

Allá por 1993 todos creímos que habíamos derrotado al malvado mago Sórdido y conseguido que Simon volviera su realidad para, así, poder disfrutar otra vez de su tranquila vida de niño. Pero las ansias de los fans hicieron que Adventure Soft se enfrascara en la realización de otra aventura, y de esta manera, 2 años más tarde, Simon vuelve a ser arrancado de su realidad para volver al mundo fantástico que tanto nos atrapó.

Simon the Sorcerer II vio la luz en 1995 de la mano de, como la anterior entrega, Adventure Soft, empresa fundada por Mike Woodroffe. En este caso se trata de una aventura mucho más adulta, pero sin perder ese toque de fantasía que hacía a su precuela tan mágica.

Si maestro! Vamos a por ese mago de pacotilla!

El malvado mago Sórdido es devuelto a la vida cuando uno de sus libros mágicos es quemado y lanzado en medio de un pentagrama, por accidente, por parte del padre de Runt, un chiquillo con deseos de llegar a ser un poderoso mago. Sórdido le promete que lo acogerá como aprendiz si le ayuda a llevar a cabo su venganza contra Simon.

Meses más tarde, la fortaleza de la desolación de Sórdido es reconstruida y él consigue hacerse corpóreo gracias a una especie de cuerpo robótico. Cuando Runt descubre la ubicación de Simon, Sórdido manda un armario mágico para capturar a Simon, pero en el trayecto de vuelta el armario no llega a la fortaleza, sino que aparece delante de la tienda del mago Calypso, el mago que Simon salvó en la primera parte del juego. A partir de aquí empezará la aventura de Simon para conseguir el blandimoco, una suerte de combustible que hará que vuelva a funcionar el armario y así, poder volver a su dimensión.

Ha pasado algún tiempo desde que Simon volviera a su realidad y ahora podemos ver como se ha convertido en todo un adolescente. En la introducción se nos muestra su habitación, una habitación desordenada, con todo por el suelo. Si nos fijamos, en la pared podemos ver pósters de, lo que parecen, mujeres desnudas, y si nos fijamos bien, podemos ver la carátula del primer juego, colgada en la pared, también.

Al haber crecido Simon, y haber llegado a esa edad tan difícil que es la adolescencia, podemos notar como su carácter y visión del mundo ha cambiado, esto hace que la aventura sea mucho más ácida, con bastantes más alusiones sexuales y que tengamos un Simon más grosero e insultante, hasta llegar a extremos que puede llegar a incomodar al jugador. Pero lo que no se pierde por nada en esta segunda aventura, es su desternillante humor y sus clarísimas referencias a cuentos, libros e historias conocidas por todo el mundo. Para ello sólo hay que fijarse en el nombre del juego.

En este caso dejamos a un lado los grandes bosques y sus mágicos lugares para pasar a un ambiente más urbano con sus locales de préstamos a un 3000% de interés con sus maneras un tanto peculiares de cobrar las deudas o grandes cadenas de restaurantes como “MucSwampys”, en las que puedes pedir tu hamburguesa de barro de ciénaga con un 20% de carne de vaca, haciendo alusión a una cadena de restaurantes que todos sabemos. También podremos encontrar la típica fuente donde las lavanderas lavan la ropa y se explican todos los chismes de la ciudad, una tienda de tatuajes con política de devolución de 24 horas y una tienda de animales un tanto peculiar entre otras muchas cosas. Aunque una buena parte del juego se desarrolla en la susodicha ciudad, no todo ocurrirá en ella. Durante nuestro viaje pasaremos a pertenecer a tripulación del capitán Long John Silver, clara alusión a la Isla del Tesoro de Robert Louis Stevenson, junto a un clon de MA, también iremos a parar a una isla un tanto peculiar, de la que no diré nada, antes de embarcarnos a nuestro destino final.

La sede de una gran y famosa cadena de hamburgueserias.

Si lo comparamos con su primera parte, una de las cosas que más nos llama la atención, es el cambio en la interfaz, en la que han desparecido los típicos verbos por iconos que nos sugieren la acción que realiza cada uno. Otro aspecto que podemos ver es que el nivel de dificultad ha bajado bastante, empezando por la cantidad de objetos que podemos llegar a llevar en el inventario (que no es mucha) y pasando por el hecho de que, a excepción del principio, no hay muchas localizaciones por las que perderse. Sí que es verdad que algunas de las situaciones con las que nos encontraremos pueden llegar a ser de lo más rocambolescas, pero con un poco de ingenio e imaginación se pueden llegar a resolver sin la necesidad de requerir una guía para llegar al final de la aventura.

La banda sonora entona muy bien con el ritmo y atmósfera del juego, podríamos llegar a decir que hasta casi pasa desapercibida en algunos momentos (que no tiene por qué ser malo). Lo único que podemos decir sobre ella es que cumple con su propósito, pero sin llegar a destacar.

Como hemos dicho anteriormente, y al igual que su precuela, Simon the Sorcerer II: The Lion, the Wizard and the Wardrobe está plagado de guiños y referencias a todo tipo de obras que tienen su sitio en el folklore del mundo. Vamos a verlas:

• El título “El León, el Mago y el Armario”, es una clarísima referencia al libro de “Las Crónicas de Narnia: El León, la Bruja y el Armario”. En el juego, tanto el armario, como el mago (Simon), tienen una elevada importancia, aunque a lo que refiere al león… bueno, se puede ver que lo han añadido para que cuadre con el título del juego.
• Aparecen ricitos de oro (aunque no es oro todo lo que reluce) y los tres ositos.
• Tenemos una clara alusión a Alí Babá y los 40 ladrones en un momento en que Simon deberá buscar una lámpara mágica entre miles de lámparas de todo tipo.
• Simon sacará una espada mágica clavada en una roca como en la leyenda del Rey Arturo.
• Hay una pequeña referencia al cuento “La princesa y el guisante” en la que deberemos despertar a una princesa que duerme encima de muchos colchones, colocándole un guisante entre ellos.

Esta es la princesa a la que deberemos despertar colcándole un guisante entre los colchones.

En muchas ocasiones Simon rompe la cuarta pared y habla con nosotros, sobretodo para referencias hacía la primera parte de la saga. Este aspecto hace nos hace cómplices de sus pereipecias durante toda la aventura.

Otro aspecto curioso son las animaciones de Simon si no le hacemos hacer nada durante un buen rato. Tiene varias, pero la más significativa es una en la que se queda completamente quieto mirándonos y le va creciendo barba, después se le vuelve blanca y Simon acaba muriendo convirtiédose en un esqueleto y cayendo desmontando al suelo. Eso sí, una vez le hacemos hacer una acción, éste vuelve a formarse y se queda tan pancho.

Simon the Sorcerer II: The Lion, the Wizard and the Wardrobe intenta seguir los pasos de su precuela pero sin llegar al mismo nivel. Quizás por la magia y el encanto del bosque, quizás por la banda sonora o quizás por la nostalgia, Simon the Sorcerer queda un peldaño más arriba que su segunda parte. Eso no quiere decir que las aventuras de nuestro, ya adolescente, mago sean malas o no valga la pena jugarlas. Porque aun estando por debajo de su antecesor, es una aventura muy superior a muchas otras, un juego muy disfrutable que hará las delicias de todos aquellos que hayan jugado al primero o no.