Titulo : Teenage Mutant Ninja Turtles: Turtles in Time
Año : 1991
Desarrolladora : Konami
Plataforma : Arcade, Super Nintendo
Género : Beat ‘em up
En los 90, el beat ‘em up era uno de los géneros estrella de los salones recreativos. Y si una empresa destacaba en este género, era Konami. Acercarse tu salón recreativo y ver el nuevo beat ‘em up de esta empresa, era sinónimo que dejarse tus monedas allí, no sería una tirarlos a la basura. Más cuando tenía licencias tan jugosas como Los Simpson o Las tortugas Ninja, que tenía locos a todos los niños de la época. Y es que, si algo caracterizaba a estos juegos, era un respeto por la obra original. Además, ver a la familia de Springfield liarse a guantazos era un tanto raro, pero para las tortugas, era algo natural.
A todo había que sumarle, que no era el primer título de Konami con los héroes ninja, ya había lanzado una excelente recreativa, así que esta segunda parte, prometía mucho. En un movimiento, muy inteligente, depuro las bases del primero e introdujo las suficientes novedades para que no fuera más de lo mismo. Para empezar, viajaríamos por el tiempo.
Una vez más Shredder y Krang, idean un malvado plan. Robar la estatua de la libertad. Puede sonar rocambolesco, pero reconozcámoslo, cosas peores se verían en la serie. Las tortugas, por supuesto no permitirán que los villanos se salgan con la suya, así que se dirigen al Technodromo para recuperar la estatua. Lo que no sabían nuestros héroes, es que realmente era una trampa. Lo que quería era enviarlas a través del tiempo, para así el poder conquistar el mundo.
Gracias a este sencillo planteamiento, que podría encajar con la serie de televisión, no resultando extraño a ningún fan, ese argumento, le juego daba un pequeño giro hacia su mitad, evitando el escenario de ciudad, que ya habíamos visto una y otra vez. Y es que realmente, los niveles más divertidos, son los que transcurren en otra época. Por supuesto el juego no se sustenta solo en esto, es un beat ‘em up, el argumento es lo de menos, aunque se agradece que respete el espíritu de la obra que refleja. Los gráficos, música y sobre todo jugabilidad, son los pilares de Teenage Mutant Ninja Turtles: Turtles in Time.
Si algo es importante en este género, es que la acción no pare un segundo, pero tampoco abrume al jugador. Y es algo que este género cumple a rajatabla, con unos tempos muy bien planificados. No paramos ni un segundo de dar mamporros a diestro y siniestro, pero en ningún momento nos vemos agobiados por los enemigos, teniendo unos preciosos segundos de descanso, después de que la pantalla haya sido limpiada de enemigos. Algo que suele pasar en este tipo de juegos, más siendo arcade, es que uno siente el juego es injusto con el jugador, al fin al cabo, están diseñados para que se echen créditos lo antes posible. Es un difícil equilibrio. Si el jugador muere muy pronto se frustrará, si nunca muere, no sale rentable.
TMNT: Turtles in Time tiene el equilibrio perfecto, en ningún momento sientes que has tirado el dinero. Si mueres, será por tu habilidad a los mandos, no por trampas que haga el mismo juego. Lo que hace que te piques y eches una moneda más, para ver hasta donde podrás llegar, convirtiéndose en un reto asumible y sobre todo adictivo. Si algo es este juego es divertido. Todo un mérito, pues al ceñirse al universo de las tortugas, los enemigos nos que sean muy variados. Básicamente soldados del clan del pie, de distintos colores, armas y comportamientos. Esto es algo heredado de la entrega anterior, pero tan bien pensado que apenas necesita cambios.
Tampoco hay demasiada variedad en los protagonistas, cada uno ataca de manera diferente según el arma, pero el sprite es básicamente. Otra lacra de la franquicia, no del videojuego, pues Konami consiguió que cada una tuviese su personalidad, algo harto difícil cuando en el juego no habla ni interactúan. Aun así, si se pregunta a todo el mundo que ha jugado, todos tendrán su favorita, con la que se sentirán más cómodo jugando.
Si a nivel jugable TMNT: Turtles in Time es algo excepcional, la dificultad está muy ajustada, el control es, sencillamente, excelente, a nivel técnico, estamos ante una máquina que roza la perfección. El nivel de las animaciones, el detalle y variedad de los fondos, los enemigos finales, de gran tamaño. Es un juego que nada más verlo entra por los ojos, incluso a día de hoy. Acompañado por unas músicas, que se quedan grabadas a fuego en la memoria, siendo de lo mejor que podíamos, si nos dejaba el sonido ambiente, disfrutar en los recreativos. Y es que este juego es sencillamente, uno de los mejores beat ‘em up que nos obsequió Konami en los noventa.
No obstante, si fuera poco, rizo el rizo, con la conversión a Super Nintendo, que trasladaba toda la esencia de la máquina, exprimiendo al máximo el hardware de la consola, para traernos a nuestros hogares uno de los mejores port de la historia. Lógicamente, estaba un peldaño por debajo en cuanto a nivel técnico, estamos hablando de una consola y una recreativa, pero a nivel jugable, era calcado. Y eso que se hicieron alguna modificación, solo se podía jugar a dobles, se añadieron enemigos, se cambió algún jefe final e incluso algún escenario, pero siempre respetando el espíritu del original. Haciendo que hay jugadores que prefieran esta versión, por encima de la original. Curiosamente, en Mega Drive se hizo algo extraño, se cogieron algunos elementos comunes, pero se cambió guion, eliminando el viaje en el tiempo, haciendo niveles totalmente diferentes, dando como resultado un juego más soso, que nada tenia que ver ni siquiera el titulo, cuando se podría haber realizado otro port igual de fantástico.
Sin lugar a dudas, Teenage Mutant Ninja Turtles: Turtles in Time, es obra de una Konami que brillaba con luz propia, de una empresa que era sinónimo de calidad, cuando uno esperaba con ansia su próximo título. Una época donde ir a los recreativos era algo mágico. Ver un juego de tu franquicia favorita suponía horas de diversión, no un producto hecho con prisas para aprovechar el tirón.
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